Las mentalidades han cambiado hasta crear una liga de pistoleros y velocistas, de jugadores que pueden jugar en varias posiciones, intercambiarse y jugar con los tamaños. Primeramente calificó el abuso del triple como “aburrido” añadiendo una descripción pesimista: “Cada penetración busca el triple y así cierto arte del juego puede estar perdiéndose. Kristaps Porzingis sorprende por su altura, claro, porque no es habitual en la vida ver gente que mida 2.21. En él, sin embargo, camisetas nba baratas es casi más rara la complexión.