Y esta fue la base del equipo que con Pat Riley en el banquillo dominó la década con un estilo de juego muy marcado: rebotear y correr a una velocidad endiablada que permitía a Magic desplegar todo su talento asistiendo y que en Estados Unidos se conoció como el Showtime. R. No al estilo español, pero sí hay comunidades de fans muy activas. “Las claves de esta historia de éxito es primero, por supuesto, el alto componente económico destinado al deportista.